¿Está la banca digital realmente protegida?

En los últimos meses hemos escuchado que gracias a la pandemia se acelero el crecimiento digital de la banca, adelantando años de digitalización. Pero para la banca este caso se multiplicó, obligando a los bancos a invertir en el desarrollo y mejora de sus aplicaciones, así como la aparición de nuevas Fintech. Debido a la pandemia se abrieron más cuentas y se estima que para este año se dupliquen las cifras del 2020. 

El acelerado proceso de digitalización a hecho que muchos bancos tengan nuevos desafíos a la hora de protegerse, a ellos mismos y a sus usuarios, de las vulnerabilidades que se presentan en la web. Es muy importante que los usuarios no solo tengan los conocimientos básicos de protección, sino que aprendan a reconocer algunas otras opciones de seguridad que podrían protegerlos aún más del cibercrimen. 

Ataques como la suplantación de identidad, fraude en la apertura de nuevos productos y servicios, fraude transaccional por canales digitales, phishing, entre otros, son los más comunes en la actualidad. En general, la prevención del fraude es difícil porque los defraudadores cambian y se adaptan continuamente. tynmagazine 

Contar con herramientas que se adecuen a este cambiar de tácticas que tienen los criminales es sumamente importante para las organizaciones financieras que deben de adaptarse a un entorno acelerado. Para poder combatir el fraude se necesita una herramienta capaz de cambiar y estar en constante monitoreo de las nuevas tácticas de los defraudadores. 

Una solución que se base en la analítica e inteligencia avanzada son esenciales para poder determinar los movimientos de los defraudadores, el machine learning llega a ser una de las técnicas más usadas para prevenirlo y una de las mejores.  

El problema que se presenta cuando la banca llega a digitalizarse es que algunas de ellas lo hacen sin una planeación y esto llega a pagar las consecuencias. Todos han podido ver como hay aplicaciones bancarias en las que los sistemas de seguridad son muy básicos y se llegan a tener algunos problemas dentro de ellas.  

El acelerado crecimiento que está teniendo la banca digital hace que no se tome el tiempo de buscar los mejores actores para la protección, dándole paso a fallas en los sistemas y haciendo a los usuarios más vulnerables en un mundo cada vez más voraz. El reconocimiento biométrico es una de las buenas prácticas que se deben de tener en cuenta a la hora de desarrollar medidas de protección para los usuarios.  

Otro de los problemas que presenta la banca en línea es la desinformación de los usuarios, muchos usuarios no tienen conocimiento de los mecanismos que utilizan sus bancos para protegerlos y, por ende, sus cuentas terminan con sistemas de protección básicos que no los ayudan a estar prevenidos para futuros ataques o robos de identidad. 

Otra de las tecnologías que más han ayudado en la prevención, son las aplicaciones de gestión de identidad digital. Las cuales, establecen diferentes mecanismos para la identificación y reconocimiento de los usuarios en el mundo digital y esto hace que temas como los de la suplantación se reduzcan significativamente. 

Las soluciones analíticas y de Inteligencia Artificial, están redefiniendo la prevención del fraude en el sector financiero, considerando comportamientos transaccionales y tendencias anómalas en las transacciones. Anteriormente, los sistemas de prevención del fraude se basaban únicamente en las reglas duras, las cuales no se adaptaban de manera eficaz a las nuevas modalidades de Fraude.  

Ahora, con el uso de sistemas de monitoreo basados en inteligencia artificial, los servicios digitales, pueden tener una mayor claridad sobre el riesgo y comportamiento transaccional de la base entera de clientes. Gracias a esta tecnología, es posible tomar decisiones en tiempo real, de autorizar o rechazar transacciones y reducir el riesgo por suplantación de identidad, entre otros.