La unión europea quiere más regulaciones contra el lavado

La EUROPOL, todavía no ha alcanzado la efectividad esperada, el defecto más relevantes que observa la oficina de la policía de la UE es la vulnerabilidad de su centralización a los ámbitos internos propios de cada país. En consecuencia, la agencia ha recomendado ajustar el control a la realidad global de todos los países asociados ante un problema que engloba tipos delictivos de carácter internacional.

Más allá de la actividad que ha desplegado la Unión durante todo el año 2020 y lo que va de 2021, su esfuerzo en la lucha contra el lavado de activos no dio los resultados esperados. Algunos funcionarios señalan que la pandemia del Covid-19 ha conspirado contra una mejor estrategia. Sin embargo, los datos que la oficina de EUROPOL ha puesto en conocimiento de las autoridades bancarias en sus países asociados son peores que los imaginados en las investigaciones para la modalidad de lavado de dinero en el viejo continente.

Las autoridades de la UE informaron que entre el 10 y el 12% de las transacciones investigadas entrañan sospechas concretas de ilegalidad a pesar de los ajustes aplicados y la mayor rigidez exigida en los niveles de control, los que no han logrado confiscar en toda zona de la UE más del 1,5% de las ganancias delictivas derivadas de esas operaciones.

Para la EUROPOL, el problema central radica en que la mayoría de los bancos y financieras legales no intercambian el flujo de información oficialmente necesaria ni llevan adelante un plan coordinado de cooperación mutua. En consecuencia, la respuesta a los delitos financieros inexorablemente ha debilitado la persecución y neutralización de esos ilícitos dentro de Europa.

Al principal problema, como se menciono anteriormente, es que se necesita centralizar la información de todos los bancos que comprenden la Unión Europea esto con el fin de tener una base actualizada que permita a las autoridades contar con la información necesaria y no solamente a las autoridades sino que también a otros bancos que serán los datos que les ayuden a prevenir el blanqueo de capitales.

EUROPOL ha propuesto a los países de la UE actuar como un centro de inteligencia financiera amplia en todo su territorio bajo una legislación unificada y ágil a efectos de neutralizar las nuevas modalidades utilizadas para el lavado de dinero y la financiación del terrorismo. No se trata sólo de controlar billetes de alta nominación, es conocido que esos billetes los utilizan los narcotraficantes y delincuentes financieros que integran las redes que operan en la UE y en muchos casos ese dinero lavado tuvo su origen en el tráfico de drogas. Además, las agencias europeas deben extremar el trabajo sobre informes descriptivos y más amplios de transacciones sospechosas de bancos y organizaciones financieras, como también del negocio de las apuestas legales o ilegales e incluir las actividades de las escribanías y los estudios contables.

Los grupos criminales también están involucrados en la inmigración ilegal, la trata de personas y la falsificación de moneda y pasaportes. El incentivo para operar también en la inmigración ilegal se disparó en la UE en los últimos tres años debido a una mayor demanda de mano de obra barata, la que es facilitada por la recesión financiera según indica el informe que, al mismo tiempo, admite que de no tomarse las medidas que exige la agencia policial europea, es muy poco probable que las actividades del tráfico de drogas, el lavado de dinero y la financiación del terrorismo disminuyan en el corto plazo.

Fuente: Infobae