Se prevé que el comercio electrónico representará el 24% del gasto global; en tarjetas para 2023

Los tarjetahabientes se alejan de las tiendas físicas en busca de precios bajos y conveniencia.

Una investigación de la Consultora RBR analiza el impacto que el crecimiento del comercio electrónico está teniendo en el uso de las tarjetas en los puntos de venta tradicionales y el papel que desempeñan las tarjetas de pago en el sector del comercio electrónico. 

 Según datos globales de las tarjetas de pagos y sus previsiones para 2023, el gasto en comercio electrónico ascendió a US $ 4.5 trillones en 2017, un 13% más que en 2016. Los principales impulsores de este crecimiento son la mayor conveniencia en comparación con la compra en tiendas tradicionales y en algunos casos precios más bajos.

 La migración continua hacia los canales digitales 

 RBR estima que el gasto en comercio electrónico aumentará a US $ 11 trillones en 2023. Daniel Dawson, quien dirigió el proyecto de investigación de RBR, dijo: “A medida que los consumidores migran cada vez más de medios físicos a canales digitales, los propietarios de los teléfonos inteligentes aumentan y las aplicaciones de pago móviles se vuelven más y más sofisticadas, el comercio electrónico experimentará un crecimiento adicional significativo”. 

 Además, los nuevos medios para mejorar la seguridad disiparán las preocupaciones de los consumidores sobre el riesgo de fraude. Para 2023, se proyecta que el comercio electrónico represente el 24% del gasto en tarjetas, en comparación con el 18% de 2017.

Los consumidores utilizan el comercio electrónico para ahorrar dinero

La investigación de RBR destaca diversos factores que están impulsando el crecimiento en el comercio electrónico, aunque muchos de ellos varían entre países. Por ejemplo, en el Reino Unido, las campañas de retailers como Black Friday y Cyber Monday han provocado una migración de las compras fuera de los comercios tradicionales, mientras que, en Ucrania, que representa el 10% del gasto en comercio electrónico de Europa central y oriental, los clientes utilizan las compras en línea como una forma de reducir costos en un entorno económico complejo.

 Por su parte Canadá es un ejemplo donde la conveniencia de poder comprar productos en línea en lugar de visitar a un comercio físico es particularmente importante, especialmente porque una gran cantidad de personas vive en áreas rurales.

La llegada de compañías como Uber, iTunes o Netflix también han impulsado el comercio electrónico en varios mercados.  

 Si bien estos servicios son de bajo monto, de algún modo están incidiendo en la cultura de la compra online de productos o servicios de bajo valor en los consumidores.